.dimas.melfi.
07 marzo 2007
guided by voices
. la ventisca te empuja con todas las ganas de llevarte lejos de casa, a dar otro paseo indeseado. las orejas nunca se sienten desprotegidas, el cabello les sirve de reparo, aunque hoy se sienten cubeteras de piel. sin embargo, nada te impide oír ciertos murmullos con un dejo vegetal reconocible; como voces de rosas heladas, o jazmines escarchados que gotean lágrimas arrastradas por el viento. te reprochás no haberte abrigado lo suficiente mientras suponés, traducís e intuís tantas cosas... tantas cosas. un susurro de ese único rayo de sol que te da en la nuca te pide que te des vuelta, que te des cuenta. girás y ahí ves una pluma de un ángel, o de un ave, o de una almohada. en cualquier caso te resulta familiar. sentís que las pestañas se arquean, como desperezándose del sopor invernal. un instante después, recibís la primera andanada de corazones. el calor está volviendo al cuerpo. ·
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